La participación ciudadana es un derecho fundamental que fortalece la democracia y promueve la transparencia en la gestión pública. En la República Dominicana, la reciente promulgación de la Ley 368-22 Sobre ordenamiento Territorial, uso de suelo y asentamientos humanos, establece responsabilidad a los Ayuntamientos de elaborar los planes municipales de ordenamiento territorial (PMOT) en coordinacióny acompañamiento del Ministerio de Planificación y Desarrollo (MEPYD), en el que reconoce la importancia de la participación ciudadana en la elaboración de los planes municipales de ordenamiento territorial. Para ello, la ley establece la creación de consejos de asesores de gestión territorial integrados por representantes del sector empresarial, miembros de la comunidad y especialistas en urbanismo, movilidad, medio ambiente y ordenamiento territorial.

La integración de estos consejos de asesores es una tarea crucial para garantizar una planificación territorial que tenga en cuenta las necesidades y demandas de los diferentes actores de la sociedad. En primer lugar, es importante involucrar al sector empresarial en la elaboración de los planes municipales, ya que ellos son los principales actores económicos en el territorio y pueden aportar su experiencia en la gestión y desarrollo de proyectos. Además, al integrar a los empresarios en estos consejos, se les da la oportunidad de contribuir en la creación de un territorio más sostenible, equitativo y habitable para sus trabajadores y la comunidad en general.

Por otro lado, la participación de los miembros de la comunidad es esencial en la creación de un plan que tenga en cuenta las necesidades de los ciudadanos. Al incluir a los ciudadanos en el proceso de planificación, se les da la oportunidad de expresar sus inquietudes, necesidades y sugerencias, lo que ayuda a asegurar que el plan final refleje las aspiraciones y deseos de la comunidad.

Finalmente, la participación de profesionales especializados en urbanismo, movilidad, medio ambiente y ordenamiento territorial es crucial para garantizar que el plan municipal esté basado en conocimientos técnicos y científicos, y que sea coherente con las políticas y normativas nacionales e internacionales. La inclusión de estos expertos asegura que el plan tenga una base sólida y viable, y que sea capaz de responder a los desafíos presentes y futuros.

En conclusión, la creación de consejos de asesores de gestión territorial es una iniciativa valiosa que permite una mayor participación ciudadana en la elaboración de los planes municipales de ordenamiento territorial. La integración de los diferentes grupos de actores, incluyendo el sector empresarial, miembros de la comunidad y expertos en urbanismo, movilidad, medio ambiente y ordenamiento territorial, garantiza que el plan final sea coherente con las necesidades de la comunidad, respete los principios de sostenibilidad, equidad y habitabilidad, y se ajuste a las políticas y normativas nacionales e internacionales. En definitiva, esto puede resultar en un territorio más ordenado, más justo y más habitable para todos los ciudadanos.